Cuando de regalos se trata, el vino siempre es una buena opción. ¿Por qué? Porque el vino está hecho para disfrutarlo, y con él estamos regalando la oportunidad a esa persona de celebrar tanto pequeños como grandes acontecimientos, o incluso hacer que las comidas del día a día se vuelvan algo especial.
Y para regalarlo, a veces nos podemos volver locos y locas eligiendo el más adecuado. Por eso, sigue leyendo para descubrir nuestros consejos.
Tips para regalar vino
Salirse de lo habitual
Si conocemos bien a la persona que vamos a regalar, sabemos qué vino escogería si lo comprara por sí misma. Esto puede ser una guía, ¡pero no la elección final! Si vas a lo fácil, seguramente el regalo puede gustar a la primera, pero no será algo inolvidable.
Ponerse en la piel del otro
Lo primero que debemos saber para regalar vino es el gusto de la persona. Puede que sí le guste el vino, pero es bueno saber si es solo un aficionado o un amante experimentado. Es importante superponer los gustos del destinatario a los nuestros, para hacer que el regalo realmente funcione.
Preguntarle a un experto
Para los que tienen menos experiencia en el mundo del vino, regalar vino puede llegar a ser todo un desafío. Sin embargo, no hay que dejarse nublar por esto, en cualquier tienda especializada en vinos hay expertos dispuestos a ayudar. Un buen Sommelier puede saber qué vino es el ideal para una persona aunque no conozcamos sus gustos en vinos. Datos como el café que le gusta o rasgos de personalidad, pueden dar las pistas para escoger un vino adecuado para alguien.
Elige según la ocasión
No depende únicamente de la ocasión donde darás el regalo, también es importante la época del año en que obsequias. Acertarás más con El Loco de Finca La Colina o un vino blanco en una cálida tarde de verano, donde se apreciarían mejor los tonos afrutados. Y en primavera, es ideal acompañar una cena con vinos dulces, o rosados. Para el invierno, la tradición recomienda los vinos tintos, aquellos con una mayor graduación alcohólica, pueden tener también un regusto dulce. También puedes tener en cuenta si el vino que regalas es para una ocasión especial concreta, de forma que el vino elegido maride con la comida que lo acompañará.
Tómate el tiempo necesario
Escoger un vino para regalar no es algo que deba tomarse a la ligera, pues son muchos detalles para analizar. Una ocasión especial requiere un vino especial. No es necesario gastar una fortuna, pero tampoco es lo ideal comprar vino barato. Muchas veces, la relación precio-calidad no es proporcional, vinos económicos pueden ser exquisitos y vinos costosos pueden no serlo. La etiqueta, reseñas, la añada, la cepa o el país de origen pueden mostrarte la calidad del vino sin importar su costo.

Bonus: Complementa el regalo con algo adicional
Si quieres ir más allá y regalar más que una botella, hay muchas cosas ideales para complementar tu regalo.
Cuando el vino que regalas no está destinado a una comida en específico, es buena idea regalar algo para acompañarlo. Quesos, frutas, o la promesa de una cena hecha por ti son solo algunas ideas. Debes saber qué combina con el tipo vino que regalas. Esto te garantizará un momento grato con esa persona especial.
Si sabes que esa persona comienza a interesarse por el mundo del vino, será bien recibido un accesorio de vinos. No es necesario que sea muy extravagante o costoso, un simple sacacorchos o una tarjeta termómetro te harán quedar bien. Incluso, puedes vitaminar tu regalo con algún libro o guía de vinos, que van a enamorar a cualquier aficionado.
Para darle otra vuelta de tuerca, puedes regalar vino como una experiencia. Por ejemplo una cata, o una entrada a un festival o feria de vinos, ¡dejará vivencias inolvidables en la persona!
Estos son solo algunos consejos para acertar al regalar vino, ya sea en una festividad, o un gusto personal. De todas formas siempre puedes consultar a los expertos que se encuentran disponibles en cualquier vinoteca. O simplemente confiar en tu instinto y en como tú conoces a esa persona, para acertar en tu regalo ideal.
¿Qué debo hacer con el vino restante una vez abierta la botella? Es un dilema común entre los amantes del vino. Aunque lo ideal es acabarlo, hay momentos en los que una botella se queda a medias, y surge la duda: ¿Cómo conservamos nuestra botella de vino abierta?
También hay quienes toman una copa diaria o descorchan una botella únicamente para experimentar como funciona con un buen queso. Es conveniente saber entonces que, al abrir una botella de vino, inicia una cuenta regresiva y la duración dependerá del cuidado que le des. ¡Aquí te regalamos 7 consejos para aprovechar una botella de vino abierta!
¿Por qué una botella de vino abierta pierde sus cualidades?
Cuando descorchamos una botella, el vino reacciona con el oxígeno, algo que es positivo en primer lugar ya que el vino “despierta”. De hecho, lo primero que hacemos al tomar una copa es moverla para el líquido libere sus aromas y eso, es oxigenación. Pero, a la larga nuestro vino se estropeará irremediablemente, ya que las propiedades organolépticas acaban mermándose. Esto es un gran problema si queremos guardar una botella de vino abierta.
Como todo, biológicamente el vino está sometido a ciertas leyes y conforme pase el tiempo acabará convertido en vinagre. ¡Leíste bien! Vinagre. Este fenómeno ocurre cuando las bacterias del ácido acético consumen el alcohol y lo metabolizan. Mientras más aire, estas bacterias se mantienen trabajando, el vino se oxida y lamentablemente sus componentes se volatilizan. No podemos impedir que este fenómeno ocurra, pero si podemos retrasarlo, protegiendo y guardando la botella de vino abierta en condiciones especiales.
1. Tapa la botella de vino abierta
Usar una cucharita a modo de protección en botellas de vino espumoso para evitar que se escape el gas ¡Es un mito! Cierra la botella de vino abierta de la forma más hermética posible, de esta manera reducirás la circulación de aire, ralentizando el proceso de oxidación. Los vinos cerrados con tapa rosca son más fáciles de guardar, pues su material impide casi completamente el contacto con el exterior. Si cierras el vino con su corcho original, asegúrate de apretarlo bien hacia el cuello de la botella.
2. Mejor en la oscuridad
La iluminación afecta negativamente al sabor del vino. Los vinos blancos y rosado no son embotellados con vidrios opacos para que se pueda ver su contenido, ¡con más razón consérvalos en la oscuridad! Sobre todo, si se trata de una botella de vino abierta.
3. Refrigéralo
A nadie le gusta un vino recién sacado del refrigerador, pero la oxidación del vino se acelera a mayor temperatura. Es conveniente refrigerar la botella y si te la vas a beber sácala con anticipación para volver a servirla. Y no lo olvides, una botella de vino abierta por más de una semana, por mucho que la refrigeres, ya es intomable.

4. Es cuestión de postura
Las botellas de vino cerradas se guardan en horizontal para que estén en contacto con el corcho. Pero, si ya hemos abierto una botella se debe guardar de forma vertical disminuyendo el contacto del aire y evitando las oscilaciones.
5. Guarda el vino restante en un recipiente más pequeño
Es importante que consideres la cantidad de vino restante en una botella de vino abierta. Mientras menos vino quede en la botella mayor oxígeno existe dentro de ella, por lo que una buena alternativa es cambiarlo a una más pequeña. Utiliza una botella que pueda cerrarse herméticamente y haz el traspaso del líquido con ayuda de un embudo. Es importante que intentes llenarlo lo máximo de tal forma que apenas quede espacio entre el vino y el tapón.
6. Extrae el aire de la botella
Existen bombas de vacío especializadas en extraer el aire, lo que alargará unos días más la vida de tu vino. Para los que amamos el vino, este eficaz utensilio es un excelente aliado, además su uso es muy sencillo. Existe una gran variedad de bombas en el mercado y se puede disponer de ellas en tiendas o vía internet.
7. Elimina el oxígeno
Otra maravillosa y además sofisticada herramienta que te ayudará a almacenar el vino restante es el inyector de gas inerte. Este tratamiento ayuda canalizar el oxígeno presente en el vino, con la ayuda de un inyector. Esto permitirá que puedas conservar por mayor tiempo tu botella de vino abierta.
¿Y qué hago si el vino ya se estropeó?
Te dimos algunas recomendaciones generales para conservar una botella de vino abierta, pero si te has olvidado de una no la deseches. Si el vino ya está pasado, es bienvenido en la cocina para reemplazar el zumo de limón o vinagre en una receta. No te preocupes por el alcohol, con pocos minutos de cocción se evapora y queda el sabor de su fruta y rica acidez.