Cada época del año supone nuevos retos en el cuidado de la vid. Y es que no todo es regar y esperar los frutos del viñedo, sino que hay muchos cuidados y tareas a tener en cuenta. Y cuando llega el final de mayo, la principal de ellas es la poda en verde de la vid.
Esta poda de primavera consiste en seleccionar aquellos brotes fértiles que darán los racimos, para eliminar los restantes y limpiar los troncos, de forma que las partes fructíferas lo sean en todo su rendimiento. Es decir, quitamos aquellas ramas y brotes que no darán uvas y restarían el sustento a los sarmientos que sí las producirán. Se eliminan las yemas, los sarmientos verdes jóvenes y las ramas sobrantes para descargar la planta, pero se eliminan también los brotes mal ubicados que serán poco fértiles. Situados por ejemplo demasiado cerca del suelo o a los que no llega bien la luz solar, pero también se tiene en cuenta la formación de la planta de cara a la poda de invierno, ya que la complementa.
Si no hiciésemos esto, se crearían unas condiciones de humedad y menor penetración del sol dentro de la cepa, que daría lugar a riesgos de plagas. Pero más importante, la savia se repartiría demasiado entre los racimos y estos no se desarrollarán al máximo.
¿Y por qué se realiza en este momento?
La poda en verde se realiza entre mayo y junio porque es el momento del desarrollo vegetativo de la vid en el que comienzan a brotar los pámpanos de las yemas. Así podemos detectar cuáles son más fructíferos, antes de que todos empiecen a desarrollarse y dificulten esta labor.
Además de favorecer la maduración y circulación de la savia, la poda en verde también hará más accesibles las labores de la viña en la poda de invierno, y permitirá que la planta tenga una forma más conveniente y sana.
Buena compañía, un delicioso menú y un vino que maride a la perfección. Esas son las claves para una cena especial. Conseguir esa mezcla de sabores que se combinen y complementen es un arte. Uno que dominamos en Vinos Sanz y hoy queremos compartir contigo 😉
A continuación te proponemos 3 opciones de maridajes según el vino que escojas:
Verdejo para mariscos, pescados y ensaladas
Los vinos de verdejo son brillantes y cítricos y un buen maridaje para comidas veraniegas como mariscos y ensaladas.
A diferencia de muchos otros vinos, no les molestan los tomates, los espárragos e incluso pueden atreverse con alguna vinagreta. Además, combinan particularmente bien con moluscos y pescado a la parrilla y frito, como pueden ser sardinas, calamares, chipirones, pulpo, mejillones y almejas o con una selección de tapas a base de mariscos. De hecho, es un gran vino para llevar en un picnic en la playa si esa es tu idea de cena romántica.
Si algunos de los productos descritos aquí van a ser los principales en tu cena, te proponemos nuestros verdejos, como Finca La Colina Verdejo CIEN X CIEN o El Loco. Este último tiene una chispa de Sauvignon Blanc, uva con la que el verdejo se mezcla para crear un fantástico coupage.
Sauvignon Blanc para pastas, comida tailandesa o sushi
El Sauvignon Blanc es uno de los mejores vinos cítricos y ligeramente herbales, con una textura suculenta y excelente. Aunque lo más clásico es maridarlo con pescados al horno o a la parrilla, son características que encajan genial con arroces con pescado o una pasta carbonara con anchoas, por ejemplo.
También puedes combinar esta uva con pastas hechas con verduras a la parrilla. Y las verduras frescas deben combinarse con un vino blanco vivo y ácido como un Sauvignon Blanc.
Por otro lado, es un vino que complementará perfectamente las diversas especias y sabores que se encuentran en diferentes platos tailandeses, gracias a su estilo magro, seco y exótico. Los vinos blancos crujientes y de clima fresco también son la mejor elección para el sushi, ya que acentúan los sabores sin dominarlos.
Si lo descrito arriba responde al menú de tu cena, te proponemos nuestros vinos Sanz Sauvignon o Finca La Colina Sauvignon.
Tempranillo para carnes como costillas o cerdo desmenuzado al horno
Unas costillas al horno con su tierna y jugosa carne es una idea de cena perfecta para tus amigos y familiares. Otra alternativa es el increíblemente tierno y cargado de sabor cerdo desmenuzado. Estas y otras recetas de carne son ideales para maridar con una botella de vino tinto tempranillo.
Para esa cena especial con plato principal de carne, te recomendamos nuestros Sanz La Capital y Sanz La Capital Roble.